Lilita Carrió desembarcó en Santa Fe este miércoles en la recta final de su gira por el norte del país que la llevó por Jujuy, Salta y Tucumán. Cuando llegó a la provincia de la bota, la líder de la Coalición Cívica provocó un sismo en la oposición que amenaza con hacer naufragar las negociaciones para el armado de un gran frente opositor al peronismo.
«Carrió siempre viene a Santa Fe a darle una mano al peronismo, desde su momento cuando intentó debilitar la candidatura a Binner hasta el día de hoy», sostuvo un dirigente del Frente Progresista a LPO recordando las críticas de Lilita al primer gobernador socialista que tuvo Santa Fe.
Es que en la capital provincial, Carrió volvió a señalar al ex gobernador Antonio Bonfatti de ser «el responsable por el crecimiento desmesurado de la droga en Rosario y ese horrible que está con él», en referencia a su ministro de Gobierno, Rubén Galassi.
Para Carrió, el ex gobernador es el «responsable de todas estas matanzas» y de tener que saber que la Ruta 34 es la vía por donde ingresa la droga que une Bolivia con Rosario. «O sos ciego o sos cómplice, y yo elijo que sean cómplices. Posiblemente Binner, que era una buena persona, fue ciego pero Bonfatti no», dijo la dirigente que estaba acompañada de la presidenta del partido a nivel provincial Lucila Lehmann.
Por otro lado, Lilita cargó contra quien fuera el dirigente más encumbrado de la Coalición Cívica, el intendente de Rosario, Pablo Javkin, a quien lo consideró «brillante en lo intelectual» pero «cobarde e inútil». De esta manera, Carrió se cobró una vieja factura que arrastra desde que el rosarino se alejó de su partido para construir Creo.
Dirigentes del Frente Progresista que pidieron preservar el off, calificaron las declaraciones de Carrió como una «práctica política detestable, irresponsable y repudiable porque miente a conciencia. Dispara un montón de denuncias a los medios pero no hace ninguna presentación en la Justicia», respondieron.
Es que los dichos de Lilita pusieron en crisis profunda las negociaciones que se estaban manteniendo para el armado de un gran frente opositor entre Juntos por el Cambio, el socialismo, el partido de Javkin y otras agrupaciones más chicas.
Por un lado, el intendente Javkin salió rápidamente a responderle a su ex jefa política a través de su Twitter: «Cobarde e inútil es dividir para que ganen siempre los mismos», le reprochó y recordó que las rutas que menciona como vías del narcotráfico son de jurisdicción nacional. «Le pido a Carrió que nos ayude con lo qué pasa en las cárceles, que es donde se organizan los crímenes», agregó.
A su vez, el presidente del Partido Socialista, Enrique Estévez, también cuestionó las acusaciones de Lilita y puso en dudas el armado de un frente opositor: «En principio, no se rompe algo que por ahora no existe, pero si la discusión se da en esos estos términos no se puede construir nada positivo».
Según fuentes al tanto de las negociaciones en la oposición que hablaron con LPO, el enojo de los espacios eludidos se trasladó a los distintos sectores del radicalismo alineado en Juntos por el Cambio que guardaron silencio frente a los dichos de Carrió.
Sin embargo, las acusaciones de la líder de la Coalición Cívica no fueron una sorpresa. Hace años que vincula a Bonfatti con el narcotráfico cada vez que pisa la provincia y la semana pasada, la actual presidenta del partido, la santafesina Lucila Lehmann adelantó que no iban a avalar un armado opositor con el ex gobernador socialista.