Alberto Fernández rechaza el plan de Cristina Kirchner para transferirle los planes sociales a los intendentes, una jugada que negocia Martín Insaurralde con los jefes comunales de la oposición y que se activó tras las críticas de la vice contra el Movimiento Evita.
El rechazo del gobierno nacional a la jugada de la vicepresidenta fue expresado por la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, que defendió la política social y dijo que los planes deben seguir siendo manejados por el Ministerio de Desarrollo Social, que conduce Juan Zabaleta.
«No, que los maneje el Ministerio de Desarrollo Social y el gobierno», respondió Cerruti cuando fue consultada sobre la posibilidad de que los planes sociales sean manejados por los intendentes.
El plan de Cristina fue adelantado este miércoles por Insaurralde, quien dijo contar con apoyo de todos los sectores para avanzar. «Hice una ronda de consultas con intendentes bonaerenses, tanto del oficialismo como de la oposición, y es unánime la aceptación de la descentralización del control de los planes sociales en los Municipios», dijo el jefe de gabinete de bonaerense. Públicamente, la idea tuvo apoyo del macrista Néstor Grindetti.
Casi al mismo tiempo, Cristina difundía un encuentro con el intendente de Pehuajó, Pablo Zurro, que le presentó una propuesta para transformar los planes sociales en trabajo.
La descentralización de los planes es una posibilidad muy riesgosa para la Casa Rosada porque los dejaría sin una herramienta política clave. Además vaciaría de poder a organizaciones como el Movimiento Evita, el principal aliado de Alberto Fernández y que controla la mayoría de los planes del Potenciar Trabajo.
Cerruti además negó que el Gobierno le haya sacado 180 mil planes a las organizaciones para dejarlos en manos de intendentes y gobernadores, como informó este jueves Clarín. «No es correcta la información», dijo la vocera, que agregó que esas personas «se anotaron en un registro que hizo el Ministerio de Desarrollo Social para buscar de otra manera de recibir el Potenciar Trabajo, algunos será a partir de municipalidades, otros de forma individual o de otras cooperativas, otros son casos en los que hay denuncias».
Por otro lado, Cerruti se refirió a los dichos del lunes de Cristina y aseguró que «jamás la vicepresidenta hablaría en contra de las organizaciones sociales». Según la vocera, Cristina «hizo un planteo puntual» sobre algo que «ya está sucediendo» desde hace meses y que es la conversión de planes en empleo formal.
Por otro lado, Cerruti también cruzó a Cristina por otro de los tramos de su discurso del lunes y aseguró que «no hay festival de importaciones». «Crece el número de importaciones por el crecimiento industrial», respondió la portavoz.
Finalmente, Cerruti adelantó que el Gobierno rechazará la nueva ley de alquileres acordada por la oposición. «Vamos a dar la discusión en el recinto la semana que viene, esperemos que el Parlamento no termine aprobando ese proyecto que deja librado una vez más a los inquilinos a la suerte de lo que los dueños o las inmobiliarias quieran hacer. Hay cláusulas que son en contra de los inquilinos, así que nos vamos a oponer», indicó.