La visita del líder de la Iglesia Católica dependerá de su condición física después de que realice una gira de casi dos semanas por Asia y Oceanía.
El Papa Francisco fijó una fecha para decidir si realizará su esperado viaje a Argentina, lo que constituiría un capítulo crucial en la larga novela sobre su visita al país.
La decisión se tomará a mediados de septiembre, tras su regreso de una gira por Asia y Oceanía, y dependerá principalmente de su condición física, considerando sus 87 años y algunos problemas de salud que enfrenta.
La posibilidad de que el Papa visite Argentina se ha visto influenciada por consideraciones sobre su salud, dejando de lado la polarización política en el país. La fuerte grieta política ha sido un factor que ha demorado la visita papal, ya que se temía que cualquier acción o declaración del Papa generara controversia y discordia.
Aunque la fecha exacta del posible viaje papal aún no se ha confirmado, se estima que sería entre noviembre y principios de diciembre, después de la segunda parte de un sínodo mundial de obispos. La salud del Papa, marcada por problemas como una microfractura en la rodilla y recurrentes episodios de bronquitis, será un factor determinante en su decisión.
Diversos sectores en Argentina están ansiosos por la visita del Papa, imaginando posibles actividades y encuentros que podría realizar durante su estadía en el país. Tanto empresarios como sindicalistas están considerando la posibilidad de organizar eventos especiales en su honor.
El presidente Javier Milei, ha expresado su deseo de recibir al Papa, pasando de ser un crítico severo a querer ser el anfitrión de la visita papal.
