El periodista hospitalizado habría solicitado «comunicarse con Perón», de acuerdo con la abogada de su esposa.
«Jorge le pidió a Elba que llamara a Perón», reveló la abogada de Elba Marcovecchio, en referencia al estado de confusión mental que estaría atravesando el periodista Jorge Lanata, quien lleva tres meses hospitalizado.
La situación habría generado tensiones dentro de su entorno familiar, especialmente en lo que respecta a su cuidado y la administración de su patrimonio.
Lanata fue internado tras sufrir una descompensación durante un procedimiento médico de rutina, y su estado de salud es descrito como delicado, lo que agravó las diferencias entre su esposa, Elba Marcovecchio, y sus hijas, Lola y Bárbara Lanata, quienes mantienen posturas enfrentadas sobre las decisiones médicas.
Las hijas del periodista solicitaron la intervención judicial para supervisar tanto su estado de salud como la gestión de su patrimonio, presentando una demanda de 67 páginas contra Marcovecchio, quien está tomando las decisiones sobre su tratamiento.
También habrían planteado la posibilidad de que se declare la «insania» de su padre, argumentando que «ya no está en condiciones de tomar decisiones por sí mismo».
Lara Piro, abogada de Marcovecchio, señaló que Lanata no se encuentra en pleno uso de sus facultades mentales, lo que genera dudas sobre su capacidad para mantener diálogos coherentes.
Piro comentó que, aunque el periodista puede hablar, sus palabras no siempre son coherentes. «Ayer, Jorge le pidió a Elba que llamara a Perón», afirmó Piro, haciendo referencia al exdictador Juan Domingo Perón, fallecido en 1974, lo que refleja la confusión mental que atraviesa Lanata. Esta afirmación de Piro fue duramente desmentida por sus hijas.
Elba Marcovecchio optó por la discreción en cuanto al estado de salud de su esposo, preocupada por preservar su imagen pública. Según Piro, Marcovecchio se resiste a la idea de declarar insano a Lanata debido a su legado y prestigio como una figura destacada del periodismo argentino.
«Elba nunca quiso que esto se haga público por la imagen de un hombre brillante», explicó Piro, destacando el esfuerzo de Marcovecchio por proteger la reputación de su esposo.
El manejo del patrimonio de Lanata también fue motivo de conflicto. Según la abogada, Andrea, la primera esposa del periodista, le había sugerido redactar un testamento en favor de sus hijas, a lo cual Lanata se negó en su momento. Además, sus hijas le pidieron que no se casara con Marcovecchio, pero él decidió seguir adelante con el matrimonio.
Piro subrayó que las decisiones tomadas por Lanata en el pasado, cuando estaba en pleno uso de sus facultades, deben ser respetadas. Hace dos años, Lanata habría realizado una importante disposición de sus bienes, un acto que, según la abogada, fue efectuado estando en plena capacidad mental.
«Esa es la voluntad de Jorge en sus plenas facultades», enfatizó Piro, insistiendo en que dichas decisiones deben prevalecer.
Este delicado escenario familiar y legal puso en el centro de la atención pública la situación de Jorge Lanata, uno de los periodistas operadores más influyentes del país, mientras aparecen interrogantes sobre cómo se manejarán su salud y su legado en los próximos meses.
