«Si va a haber 2, va a haber 3 listas en la Provincia de Bs As», afirmaron desde el Frente Renovador.
En una reciente publicación en X, Rubén Eslaiman, vicepresidente del bloque de diputados del Frente Renovador de la provincia de Buenos Aires, anunció que su partido, liderado por Sergio Massa, competirá con listas propias en las próximas elecciones legislativas.
Este anuncio se da en medio de crecientes tensiones dentro de Unión por la Patria, donde se especula que el sector de Axel Kicillof también tiene planes de presentar su propia lista, lo que evidencia las enormes divisiones internas cada vez más pronunciadas en el kirchnerismo.
«Si va a haber 2, va a haber 3 listas en la Provincia de Bs As», afirmó Eslaiman, dejando en claro que ningún sector puede adueñarse de la voluntad política de los demás.
Este anuncio llega en un momento de conflictos dentro de Unión por la Patria, en un ambiente político complicado tras la victoria de Javier Milei.
El posteo de Eslaiman fue acompañado de un artículo de Infobae que menciona rumores sobre una posible ruptura con La Cámpora, de acuerdo con declaraciones de dirigentes cercanos a Kicillof, quienes señalaron que «todo va camino a que haya dos listas en todas las categorías».
Esta situación refleja un creciente distanciamiento entre las distintas facciones del kirchnerismo, lo que amenaza con fragmentar aún más la ya debilitada estructura del peronismo en la provincia.
La reciente reunión en Berisso, donde se debatió la creación de un espacio político propio dentro del peronismo, marca un paso importante para los intendentes que buscan fortalecer la figura de Kicillof y consolidar su liderazgo, entrando en conflicto con Cristina Kirchner.
«Tenemos que terminar de fortalecer el proyecto provincial de Axel y que él sea el conductor», destacó un intendente, subrayando el objetivo de presentar listas propias en las elecciones legislativas de 2025, independientemente de lo que ocurra a nivel nacional.
En este contexto, el Frente Renovador se perfila como un actor importante en la interna de Unión por la Patria, reafirmando su intención de participar activamente en el proceso electoral.
Las tensiones entre Máximo Kirchner y Axel Kicillof no para de escalar, con ambos en una pugna por el control dentro del kirchnerismo.
En una reciente reunión en el Club Atenas de La Plata, Máximo Kirchner aludió a Kicillof sin mencionarlo directamente, insinuando que este último alcanzó su posición por decisión de Cristina Fernández de Kirchner.
Este comentario generó una fuerte reacción por parte del Gobierno bonaerense, donde se preguntaron: «¿No tiene nada mejor que hacer que socavar al único gobernador kirchnerista del país?».
El origen de esta pelea no reside en diferencias ideológicas, sino en la lucha por el poder y el control político. Con la competencia por la gobernación de 2027 en el horizonte, figuras como el intendente Jorge Ferraresi expresaron su deseo de liderar el movimiento.
Desde el entorno de Máximo Kirchner, hay una fuerte preocupación por estas rebeliones en torno a Kicillof, con algunos sugiriendo que ciertos aliados buscan «jubilar» a la expresidente, Cristina Kirchner.
Por otro lado, desde el sector de Kicillof, reconocen que «la realidad social cambió» y están dispuestos a debatir sobre las «nuevas demandas de la sociedad».
Estas disputas se desarrollan en el contexto electoral del próximo año. Un grupo de dirigentes peronistas se opone a repetir la fórmula de 2023, donde la definición de listas estuvo en manos de Máximo Kirchner y Martín Insaurralde.
Aquellos que no se alinean con La Cámpora buscan amparo bajo el liderazgo de Kicillof, presionando para que sea considerado una figura esencial.
A esto se suma el Frente Renovador, que entra en la disputa interna de cara a las elecciones legislativas del próximo año, complicando aún más el panorama político y generando incertidumbre sobre la unidad del frente en un momento crítico para el futuro del kirchnerismo.
