El ex intendente de Lomas de Zamora presentó un descargo ante la justicia para explicar el origen de su creciente patrimonio y sus lujosos viajes al exterior, citando los ingresos de su ex esposa como una de las razones del incremento.
El ex intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, sigue sumando complicaciones judiciales tras la polémica causa del Yategate, en la que se investiga su supuesto enriquecimiento ilícito durante su desempeño como funcionario público.
En un intento por justificar su elevado patrimonio y los lujos que ha exhibido en los últimos años, el exfuncionario bonaerense presentó ante la justicia un extenso descargo en el que argumento que gran parte de sus ingresos provienen de su ex esposa, la conductora y modelo Jésica Cirio.
En su escrito dirigido al juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, Insaurralde rechazó las acusaciones de enriquecimiento ilícito y defendió que su nivel de vida estaba vinculado a los ingresos de la sociedad conyugal con la entonces conductora de Morfi en Telefe, cuya actividad profesional, según él, ha sido omitida por la acusación.
Este alegato se presentó en el marco de una investigación iniciada a raíz de imágenes filtradas en las que el exintendente se mostraba disfrutando de lujos junto a la modelo Sofía Clerici en el yate Bandido, atracando en costas europeas y hospedándose en exclusivos resorts, cuyos costos por noche superan los 10.000 dólares.
La causa, que despegó en plena campaña electoral, ha tomado relevancia debido a la magnitud de las acusaciones. Además de los lujosos viajes, se investiga la compra de propiedades a través de testaferros, el uso de vehículos a nombre de terceros y otros movimientos patrimoniales que no coinciden con los ingresos declarados ante la AFIP.
En su defensa, Insaurralde presentó una serie de documentos, incluidas las declaraciones juradas del periodo 2010-2023, con el objetivo de demostrar que la evolución de su patrimonio está en línea con sus legítimos ingresos, incluidos los generados por su exesposa.
La defensa sostiene que, durante su matrimonio con Cirio, ambos compartieron ingresos y gastos en una sociedad conyugal que nunca fue debidamente considerada en el análisis fiscal. Insaurralde explicó que, de acuerdo con la normativa vigente, la integración de su patrimonio debe ser vista de manera conjunta con el de su ex mujer, y que la investigación ha obviado esos aspectos. Además, acusó al Ministerio Público Fiscal de haber interpretado erróneamente las erogaciones del matrimonio, considerando solo los gastos y no los ingresos, lo que habría llevado a una acusación infundada.
Por otro lado, el fiscal Sergio Mola, encargado de la investigación, ha solicitado la indagatoria de Insaurralde y varias personas de su entorno cercano, entre ellas sus hijos, su exesposa, y varios presuntos testaferros.
El fiscal sospecha que los ingresos de Insaurralde provienen de actos de corrupción durante su gestión pública, y que los bienes adquiridos y el patrimonio acumulado serían el resultado de maniobras de lavado de dinero. Se destaca que los viajes internacionales de lujo de Insaurralde, que incluyen vuelos privados y estancias en hoteles de 5 estrellas, no pueden justificarse con los ingresos legítimos de un funcionario público.
A lo largo de la causa, se ha documentado que en los últimos dos años, el ex intendente gastó más de 98.000 dólares en viajes internacionales, cifra que se considera insostenible dado su historial económico en el ámbito público. Esto ha llevado a los fiscales a sospechar que detrás de sus viajes y gastos se esconde una red de lavado de dinero mediante sociedades y personas de fachada.