El presidente argentino se encontró este sábado con el líder opositor venezolano en la Casa Rosada, en un encuentro cargado de simbolismo político.
Edmundo González Urrutia, presidente electo de Venezuela y figura clave en la lucha contra el régimen de Nicolás Maduro, aterrizo anoche en Buenos Aires para sostener una reunión crucial con el mandatario argentino, Javier Milei.
La reunión, que comenzó a las 11 de la mañana, se realizó sin declaraciones conjuntas ni conferencia de prensa posterior, según confirmó TN. Juntos saludaron desde el balcón ante miles de venezolanos que se concentraron en Plaza de Mayo.
La visita se da en un contexto de tensión bilateral, marcado por la reciente detención del gendarme argentino Nahuel Gallo en Venezuela, acusado por el régimen chavista de planear supuestas acciones desestabilizadoras bajo el pretexto de una visita sentimental.
La llegada de González Urrutia, exiliado en España tras ser declarado ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio por la oposición venezolana, coincide con una fuerte denuncia presentada por el gobierno argentino ante la Corte Penal Internacional por la detención de Gallo.
Javier Milei, quien fue de los primeros líderes en reconocer a González Urrutia como legítimo presidente y denunciar fraude electoral por parte de Nicolás Maduro, ya había provocado una reacción hostil de Caracas, que expulsó al cuerpo diplomático argentino en represalia. Este nuevo capítulo refuerza la postura de la administración Milei en su respaldo a los líderes opositores de Venezuela.
La llegada de González Urrutia a la Argentina, confirmada por la exembajadora venezolana Elisa Trotta, despertó una gran expectativa entre los sectores opositores al chavismo.
La diplomática convocó a la comunidad venezolana residente en el país a congregarse en la Plaza de Mayo esta mañana para brindar apoyo al líder electo. “Es un momento histórico para la unidad y la democracia en Venezuela”, destacó en un mensaje difundido en redes sociales.
La reunión con Milei será la primera parada de una intensa gira internacional que llevará a González Urrutia a Uruguay, Panamá y República Dominicana en los próximos días. En cada destino, el dirigente buscará el apoyo de los principales líderes políticos para exigir al régimen chavista que respete los resultados de las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio, donde se alzó como ganador pese a las denuncias de fraude y persecución.
El calendario de la gira culminará el próximo 10 de enero, fecha límite para la finalización del mandato de Maduro. Según González Urrutia, ese día marcará “el inicio de un nuevo capítulo para Venezuela, con unidad y reconciliación como pilares fundamentales”.
El gobierno argentino, que fue de los primeros en reconocer la victoria de González Urrutia, tomó una postura firme contra el régimen de Maduro. Este quiebre diplomático quedó evidenciado tras la expulsión del cuerpo diplomático argentino en Caracas y el cierre de la embajada por parte del chavismo. A pesar de ello, Argentina ha continuado su respaldo a los opositores venezolanos, facilitando refugio y apoyo logístico en su territorio.
Antes de partir hacia Buenos Aires, González Urrutia compartió un mensaje en sus redes sociales, llamando a todos los venezolanos a unirse por el bien del país. “El 10 de enero debe ser el día del abrazo entre todos los venezolanos, sin distinciones ni rencores. Es la oportunidad para avanzar juntos hacia la reconciliación nacional”, expresó.
Tras la reunión en Casa Rosada, el líder venezolano viajará a Montevideo para reunirse con el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, en una nueva etapa de su gira diplomática. Cada encuentro refuerza su mensaje de unidad y la necesidad de apoyo internacional para lograr una transición democrática en Venezuela.