El Ejército israelí confirmó que Mohamed Hassan Mohamed Awad fue abatido durante un bombardeo en el norte de la Franja de Gaza.
El Ejército de Israel informó que eliminó a Mohamed Hassan Mohamed Awad, terrorista palestino señalado como el principal responsable del secuestro y asesinato de la familia Bibas. Awad, miembro de las Brigadas Muhayidin —brazo armado del Movimiento Palestino Muhayidin— murió en un bombardeo israelí en el norte de la Franja de Gaza.
Awad había liderado la invasión al kibutz Nir Oz, donde fueron secuestrados Shiri Bibas y sus dos hijos, Ariel y el bebé Kfir. Además, según las autoridades israelíes, fue responsable de las muertes del ciudadano israelí-estadounidense Gadi Haggai y su esposa Judith Weinstein, así como del secuestro de varios trabajadores tailandeses. “Como parte de su papel en la organización terrorista, Awad se dedicó hasta su muerte a reclutar agentes terroristas”, indicó el Ejército en un comunicado.
El caso de la familia Bibas generó gran conmoción en Israel, especialmente tras la entrega de restos humanos por parte de Hamas el pasado 20 de febrero. Las autoridades denunciaron que los restos no coincidían con los de Shiri Bibas, y Hamas argumentó que se habían “mezclado” tras un bombardeo. Un día después, se entregaron restos confirmados por el Foro de Familiares de Rehenes y Desaparecidos como pertenecientes a la rehén.
Hamas, organización considerada terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea, afirmó que Shiri y sus hijos murieron en noviembre de 2023 como consecuencia de un bombardeo israelí “ordenado” por el primer ministro Benjamin Netanyahu. Estas declaraciones fueron rechazadas por las autoridades israelíes, que responsabilizan directamente a los terroristas por sus muertes.
La entrega de los cuerpos fue calificada por el gobierno israelí como un “espectáculo monstruoso”. En un comunicado, describieron como “repulsivo y horrendo” el acto de Hamas al utilizar la ceremonia de entrega de los cadáveres como propaganda, incluyendo entre ellos los cuerpos de la familia Bibas, cuyas muertes se convirtieron en un símbolo del horror del ataque del 7 de octubre.
